Este año, la tradicional noche del Seder de Pesaj en Israel está marcada por un conmovedor llamado del presidente Isaac Herzog. En un mensaje sincero a la nación, insta a los israelíes a observar un gesto simbólico al dejar una silla vacía en las mesas del Seder. Este acto sirve como una poderosa expresión de solidaridad con las familias afligidas y aquellos cuyos seres queridos son rehenes, resonando profundamente con el espíritu de la festividad.
Reconocer el cambio:
El presidente Herzog reconoce las circunstancias sin precedentes que rodean la celebración de la Pascua de este año. Mientras las familias se reúnen para volver a contar la historia de la liberación, los ecos de los acontecimientos recientes persisten. El presidente enfatiza el profundo impacto de los desafíos recientes, particularmente en las familias directamente afectadas por la pérdida y el cautiverio.
Una silla vacía:
El simbolismo de una silla vacía tiene un peso inmenso y encarna la ausencia de quienes ya no están con nosotros o no pueden unirse a la celebración. Para las familias de los rehenes y los deudos, esta silla vacía es un recordatorio constante de su dolor y anhelo. El llamado del presidente Herzog a dejar una silla vacía en la mesa del Seder sirve como una expresión tangible de empatía y apoyo para estas familias.
Solidaridad y Compasión:
A través de este gesto simbólico, el Presidente Herzog llama a todos los israelíes a solidarizarse con quienes sufren. Al reconocer las sillas vacías en los hogares de todo el país, se recuerda a las personas la responsabilidad compartida de apoyarse unos a otros en tiempos difíciles. Este acto de compasión fomenta un sentido de unidad y fuerza colectiva dentro de la sociedad israelí.
Honrar los compromisos:
En vísperas de Pesaj, el presidente Herzog reafirma el pacto sagrado entre el Estado de Israel y sus ciudadanos. Destaca la obligación de la nación de buscar incansablemente el regreso seguro de todos sus hijos e hijas. Este compromiso de garantizar el bienestar de cada individuo subraya los valores fundamentales de libertad y justicia que se encuentran en el corazón de la narrativa de Pesaj.
Ampliación del soporte:
Además de expresar solidaridad con las familias de los afligidos y de los rehenes, el presidente Herzog extiende su apoyo a las comunidades afectadas por las recientes evacuaciones y a los valientes hombres y mujeres que sirven en las FDI y las fuerzas de seguridad. Su mensaje de aliento y solidaridad abarca a todos aquellos que se han visto afectados por la adversidad, subrayando la resiliencia y la unidad del pueblo israelí.
Conclusión:
Mientras Israel se prepara para celebrar el festival de la libertad, el llamado del presidente Isaac Herzog a una silla vacía en la mesa del Seder sirve como un conmovedor recordatorio de la empatía y la resiliencia colectivas de la nación. Al adoptar este gesto simbólico, los israelíes honran la memoria de los caídos, expresan solidaridad con los afligidos y reafirman su compromiso con los valores de compasión y unidad que definen el espíritu de Pesaj.