Miami, Florida – En una cálida noche en el sur de Florida, la comunidad judía se reunió en el Shul de Bal Harbour, una sinagoga ubicada al norte de Miami Beach, para discutir la guerra que está teniendo lugar a miles de kilómetros de distancia: el conflicto entre Israel y Hamás. En esta región que solía ser un bastión demócrata pero se ha desplazado hacia la derecha en los últimos años, los judíos del sur de Florida encuentran un inesperado apoyo en la administración del presidente Joe Biden a la ofensiva israelí.
El Shul de Bal Harbour, en el corazón de la comunidad judía del sur de Florida, recibió a miembros de la congregación y al gobernador de Florida, Ron DeSantis, un firme defensor de las prioridades conservadoras en lo que respecta a Israel. La reunión se convirtió en un lugar de reflexión sobre la postura de Biden en el conflicto.
Georg Lipsztein, miembro de la congregación, expresó su satisfacción con el enfoque de Biden, afirmando: «Creo que ha enviado un mensaje contundente y eso es muy importante. Israel va a hacer lo que tiene que hacer».
El apoyo a Israel en este enclave del sur de Florida, que una vez fue un bastión demócrata, es fundamental para la percepción de la gestión de Biden en el conflicto entre Israel y Hamás. Con el desplazamiento hacia la derecha en la región, los votantes judíos juegan un papel decisivo en la política estatal. La masacre de Hamás el 7 de octubre, que dejó una estela de destrucción y víctimas en la Franja de Gaza, ha despertado profundas emociones entre la comunidad judía estadounidense.
La representante federal Debbie Wasserman Schultz, quien representa a los suburbios al sur de Fort Lauderdale, destacó la importancia del apoyo de Biden en este contexto: «El consuelo y la determinación que ha demostrado han sido realmente críticos en un momento en el que la gente está realmente desesperada».
El Partido Demócrata ha perdido terreno en el sur de Florida en los últimos años, y la administración de Biden se encuentra en una encrucijada al tener que equilibrar su apoyo a Israel con la preocupación por la crisis humanitaria en Gaza.
En las elecciones presidenciales de 2020, alrededor del 43% de los votantes judíos de Florida apoyaron a Trump, en comparación con el 30% a nivel nacional. Esta tendencia se refleja en el apoyo a DeSantis, quien ganó un gran número de votantes judíos en su reelección y cambió el tradicional condado de Miami-Dade, históricamente demócrata, en un estado clave.
El sur de Florida alberga una diversa comunidad judía que incluye una fuerte presencia ortodoxa, así como inmigrantes de Centro y Sudamérica, para quienes el apoyo a Israel es una cuestión importante. La comunidad judía en esta región incluye cubanos y venezolanos que siguen de cerca las relaciones de Estados Unidos con sus países de origen y que tienden a apoyar a los republicanos.
Jacob Solomon, presidente de la Federación Judía del Gran Miami, subrayó la fuerte conexión de esta comunidad con Israel, calificándola como «una de las comunidades sionistas más proisraelíes de América del Norte».
A pesar de las diferencias políticas en otros asuntos, algunos demócratas, como la senadora Lauren Book, han expresado su agradecimiento por el apoyo brindado a Israel en medio de la crisis. La comunidad judía en el sur de Florida está siguiendo de cerca los acontecimientos en Medio Oriente y presionando a los líderes para mantener un fuerte respaldo a Israel durante la ofensiva.
El conflicto en curso ha generado preocupaciones sobre el crecimiento del sentimiento antiisraelí en algunas instituciones educativas. Algunos incidentes recientes en universidades de California y Nueva York han suscitado preocupación, y se han realizado vigilias y manifestaciones en la Universidad de Miami.
En este contexto político y emocionalmente cargado, la administración de Biden se enfrenta al desafío de mantener un equilibrio delicado entre mostrar apoyo a Israel y abordar la crisis humanitaria en Gaza, mientras la comunidad judía del sur de Florida observa atentamente su respuesta a este conflicto lejano pero profundamente significativo.