El 63% de los judíos de EE. UU. aprueban a Biden, en comparación con el 80% del año pasado, muestra una encuesta

El índice de aprobación del presidente cayó precipitadamente durante el año pasado luego de la retirada de Afganistán, la persistente pandemia de COVID y el aumento de la inflación.

La buena noticia para Joe Biden es que la mayoría de los judíos estadounidenses aprueban el trabajo que está haciendo. La mala noticia es que el número en una nueva encuesta, 63%, es una fuerte caída de dos dígitos desde donde estaba el año pasado.

Una encuesta publicada el miércoles por el Instituto del Electorado Judío, un grupo liderado por destacados demócratas judíos, mostró que el índice de aprobación de Biden bajó del 80% en una encuesta realizada por la misma organización en julio pasado. Su índice de desaprobación este año es del 37%, frente al 20% de julio pasado.

Ambas encuestas fueron realizadas por GBAO Strategies. El Instituto del Electorado Judío dio un giro positivo a los números. “Los judíos estadounidenses continúan apoyando al presidente Biden y al Partido Demócrata a niveles más altos que la población electoral estadounidense en general, una tendencia que parece encaminada a continuar en las elecciones de mitad de período de este año y en el futuro”, dijo el presidente del grupo, Martin Frost, un ex congresista demócrata judío de Texas.

Los números de aprobación de Biden en general han caído precipitadamente en el último año, como resultado de una salida fallida de Afganistán, una pandemia persistente y una inflación que su gobierno no puede detener. Su índice de aprobación en general ronda el 42%, el más bajo de su presidencia. Los votantes judíos generalmente favorecen a los demócratas.

Un área en la que Biden obtiene una buena puntuación entre los judíos es en su manejo de la guerra de Rusia contra Ucrania, con un 72% de aprobación.

El apoyo a los demócratas en una boleta genérica del Congreso también se redujo del 68 % al 61 %, mientras que el apoyo a los republicanos aumentó del 21 % al 26 %. Ambos partidos ya están haciendo una fuerte campaña en las comunidades judías donde los cambios en la votación pueden cambiar la composición del Congreso, donde los demócratas tienen una pequeña mayoría.

Los encuestadores llegaron a 800 votantes judíos registrados a través de mensajes de texto del 28 de marzo al 3 de abril y el margen de error es de 3,5 puntos porcentuales.

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