Un equipo de excavación en la ciudad ucraniana de Lviv ha descubierto un escondite en el sistema de alcantarillado al que escaparon los judíos durante la ocupación nazi.
La historiadora local Hanna Tychka dijo a Reuters que, de los más de 100.000 judíos de la ciudad en el momento de la Segunda Guerra Mundial, un tercio de la población de Lviv, la mayoría fueron asesinados por los nazis, pero unos pocos pudieron escapar del gueto judío haciendo un túnel en Lviv. alcantarillado.
Estos sobrevivientes incluyeron a Ignacy Chiger y su hija Krystyna Chiger, quienes luego escribieron un libro sobre su fuga.
Tychka y un equipo de excavadores descubrieron recientemente el lugar exacto en el sistema de alcantarillado donde se escondieron los Chigers desde 1943 hasta 1944.
Ignacy Chiger cavó siete metros debajo de los cuarteles de su gueto para construir un túnel que llegara a la alcantarilla, atravesando la pared de concreto de 35 pulgadas de espesor de la alcantarilla, explicó el historiador.
“Tuvieron que trabajar en silencio para que los nazis no se enteraran de que la actividad de excavación estaba ocurriendo en el sótano del cuartel. Los judíos usaron un martillo envuelto en un [paño para quitar el polvo]”, dijo Tychka a Reuters.
En el escondite subterráneo, donde de un grupo inicial de 21 judíos solo sobrevivieron 10, los investigadores encontraron reliquias que dijeron que fueron utilizadas por los judíos que se escondían allí, incluido un plato oxidado y rastros de combustible de linterna. También encontraron trozos de vidrio pegados entre ladrillos en la pared que creen que fueron colocados para evitar que las ratas comieran su comida.
Tychka también descubrió una tubería que, según dijo, fue utilizada por el grupo para beber agua.
Con el grupo en constante peligro, varias personas no pudieron hacer frente a las horribles condiciones en la alcantarilla y se fueron.
David Lee Preston, hijo de Halina Wind Preston, que tenía poco más de veinte años cuando se escondió con los demás en la alcantarilla, dijo a Reuters que la investigación del equipo muestra “un gran deseo de muchos jóvenes ucranianos de aclarar la historia y evitar que estar corrompido”.