La guerra en Ucrania ha traído innumerables desafíos para sus habitantes desde su inicio en 2022. Sin embargo, en medio del conflicto, la comunidad judía ha encontrado formas de mantener su fe y tradiciones vivas, especialmente durante el Rosh Hashaná, el Año Nuevo judío. En un gesto histórico, el sonido de los shofares se escuchó a lo largo de las líneas del frente ucraniano, donde soldados judíos celebraron el inicio del nuevo año con kits de festividades proporcionados por la Federación de Comunidades Judías de Ucrania (FJCU). Esta iniciativa no solo refuerza la fe de los soldados, sino también su conexión con el patrimonio cultural judío.
En este artículo, exploraremos cómo la comunidad judía en Ucrania, junto con organizaciones como la FJCU y otras entidades religiosas, ha movilizado recursos para apoyar a los soldados judíos y a las comunidades en medio de un conflicto devastador. Veremos cómo el sonido del shofar ha resonado en un país asediado por la guerra y cómo las tradiciones siguen siendo un faro de esperanza y unidad para el pueblo judío.
El Shofar: Un Sonido de Esperanza en Medio del Conflicto
El shofar, un cuerno de carnero que se sopla durante las festividades judías, es uno de los elementos más simbólicos de la celebración de Rosh Hashaná. En tiempos de paz, este sonido marca el inicio del nuevo año, llamando a la reflexión y al arrepentimiento. Sin embargo, en el contexto de la guerra en Ucrania, su significado ha cobrado una nueva dimensión.
Por primera vez desde que estalló el conflicto, los soldados en el frente pudieron escuchar el shofar como parte de una iniciativa de la Federación de Comunidades Judías de Ucrania (FJCU). Este esfuerzo, dirigido por el rabino Yaakov Sinyakov, buscaba proporcionar a los soldados una oportunidad de reconectar con sus raíces espirituales en medio de la batalla. Según el rabino, la respuesta de los soldados fue «abrumadora», mostrando cuánto significaba para ellos mantener su fe en momentos tan oscuros.
Apoyo a los Soldados Judíos en el Frente
La guerra ha llevado a una movilización sin precedentes de recursos comunitarios y religiosos en Ucrania. La FJCU, afiliada al movimiento Jabad-Lubavitch, ha sido uno de los principales actores en garantizar que los soldados judíos no se sientan desconectados de sus tradiciones. En total, más de 1,200 soldados judíos han sido apoyados por la FJCU, ya sean profesionales, voluntarios o conscriptos.
Kits de Festividades: Más Allá del Shofar
Además de distribuir shofares, la FJCU proporcionó kits de festividades que contenían elementos esenciales para la celebración de Rosh Hashaná, como kipás, velas y miel, un símbolo de buenos augurios para el nuevo año. Estos kits también incluyeron materiales informativos sobre la festividad y libros de oración en ucraniano, parte de una tendencia más amplia de la comunidad judía de Ucrania hacia la adopción del idioma nacional en lugar del ruso, idioma históricamente predominante.
Esta transición lingüística es especialmente significativa, ya que refuerza la identidad cultural y nacional de los judíos ucranianos en un momento en que su país está luchando por su soberanía y supervivencia.
3. El Papel de las Sinagogas y Comunidades Judías en Ucrania
La FJCU no solo ha apoyado a los soldados en el frente, sino también a las comunidades judías a lo largo de Ucrania. Con la ayuda de emisarios de Jabad en 30 ciudades ucranianas, se enviaron kits de festividades a más de 51,000 hogares judíos, alcanzando a comunidades en 169 ubicaciones diferentes.
El rabino Mayer Stambler, presidente de la FJCU, destacó que, a pesar de las condiciones difíciles, espera que las sinagogas en Ucrania estén llenas durante los servicios de Rosh Hashaná, con comidas festivas organizadas para miles de personas. Estos esfuerzos comunitarios son vitales, ya que las familias judías se enfrentan no solo a la devastación de la guerra, sino también a la incertidumbre económica, cortes de electricidad y el riesgo constante de nuevas movilizaciones militares.
Fortaleciendo el Vínculo Espiritual
Para muchos judíos en Ucrania, la capacidad de asistir a los servicios religiosos y celebrar festividades tradicionales, incluso en tiempos de guerra, es una fuente crucial de consuelo y fortaleza. Las sinagogas no solo actúan como centros de oración, sino también como espacios comunitarios donde las personas pueden reunirse, compartir sus esperanzas y miedos, y encontrar apoyo mutuo.
Los Desafíos del Clero Judío en Tiempos de Guerra
La guerra en Ucrania no ha perdonado a ningún sector de la sociedad, incluyendo a los líderes religiosos. David Milman, quien fue designado como el primer capellán judío oficial del ejército ucraniano, ha desempeñado un papel clave en proporcionar atención pastoral a los soldados judíos heridos y sus familias. Milman, que está afiliado a la Sinagoga Brodsky de Kyiv, también ha ayudado en la organización de circuncisiones rituales para hombres judíos que no las recibieron de niños.
Uno de los momentos más dolorosos para la comunidad judía fue la pérdida del hijo adoptivo del rabino Moshe Azman, líder de la Sinagoga Brodsky. Su hijo fue conscripto en el ejército ucraniano poco después de convertirse en padre y murió en combate semanas después. Este evento subraya el costo humano de la guerra, que ha cobrado la vida de miles de ucranianos, judíos y no judíos por igual.
Peregrinos Judíos en Uman: Tradición vs. Seguridad
Además de los esfuerzos para apoyar a los soldados en el frente, Ucrania ha visto la llegada de miles de peregrinos judíos de todo el mundo, desafiando advertencias de seguridad para participar en la peregrinación anual de Rosh Hashaná en la ciudad de Uman. Esta peregrinación rinde homenaje al rabino Najman de Breslov, una figura influyente en el movimiento jasídico, cuya tumba en Uman es un sitio de gran importancia espiritual.
A pesar de los riesgos asociados con la guerra en curso, los peregrinos continúan acudiendo a Uman, lo que demuestra el profundo significado de esta tradición. Aunque las autoridades ucranianas y de otros países han emitido advertencias, la devoción de los peregrinos sigue siendo inquebrantable.
La Comunidad Judía de Ucrania: Un Faro de Resiliencia
El conflicto en Ucrania ha afectado a todos los sectores de la sociedad, pero la comunidad judía ha mostrado una notable capacidad de recuperación. Desde el sonido del shofar en las trincheras hasta las comidas festivas en las sinagogas y la peregrinación a Uman, las tradiciones judías continúan brindando esperanza y unidad en medio de la adversidad.
El Futuro de la Comunidad Judía en Ucrania
Mirando hacia el futuro, queda por ver cómo la comunidad judía de Ucrania seguirá navegando los desafíos de la guerra y la posguerra. Sin embargo, lo que está claro es que, a pesar de la incertidumbre y las dificultades, la fe y la tradición seguirán siendo pilares fundamentales en la vida de los judíos ucranianos. Las organizaciones como la FJCU y los líderes religiosos locales continuarán desempeñando un papel crucial en mantener el espíritu de la comunidad fuerte y resiliente, independientemente de las pruebas que aún puedan enfrentar.
Conclusión: Fe, Tradición y Esperanza en Tiempos de Guerra
El sonido del shofar en las líneas del frente ucraniano es un recordatorio poderoso de la resiliencia del pueblo judío y de la capacidad humana para encontrar esperanza y significado incluso en las circunstancias más difíciles. A medida que Ucrania continúa su lucha por la libertad, la comunidad judía sigue siendo un faro de fuerza, mostrando al mundo que, a pesar de la guerra, la fe y las tradiciones perduran.
En medio de la devastación, las iniciativas lideradas por organizaciones como la FJCU aseguran que los soldados y las comunidades judías mantengan su conexión con su herencia espiritual, ofreciendo consuelo y esperanza en un momento en que ambos son más necesarios que nunca.