Belmopán, Belice – En un giro diplomático significativo, Belice anunció el martes la suspensión de sus relaciones con Israel, convirtiéndose en el segundo país latinoamericano, después de Bolivia, en romper lazos debido a la actual guerra entre Israel y Hamás en Gaza. El gobierno beliceño, en una declaración oficial, citó los «incesantes bombardeos indiscriminados» en la Franja de Gaza como la razón principal detrás de esta decisión.
La medida implica la retirada del embajador israelí, Einat Kranz-Neiger, y la cancelación de la solicitud de acreditación del cónsul honorario de Belice en Tel Aviv. Este acto diplomático busca expresar la preocupación de Belice por lo que considera una violación sistemática del derecho internacional por parte de Israel desde el inicio de las hostilidades el 7 de octubre.
Esta decisión sigue los pasos de Bolivia, que cortó relaciones con Israel el 1 de noviembre, acusando al país de «realizar crímenes contra la humanidad». Además, Colombia, Chile y Honduras retiraron a sus embajadores como gesto de protesta contra la situación en Gaza.
La declaración oficial de Belice sostiene que desde el 7 de octubre, Israel ha violado sistemáticamente el derecho internacional, generando preocupación y condena a nivel internacional. Se espera que esta decisión tenga implicaciones significativas en el ámbito diplomático y podría influir en la posición de otros países latinoamericanos frente al conflicto en Medio Oriente.
Contexto del Conflicto en Gaza
El conflicto en Gaza, que ha llevado a la suspensión de relaciones diplomáticas por parte de Belice, tiene su origen en un ataque masivo llevado a cabo por aproximadamente 3,000 terroristas de Hamás el 7 de octubre. Estos insurgentes irrumpieron en la frontera sur de Israel, provocando la muerte de al menos 1,200 personas, en su mayoría civiles, y tomando alrededor de 240 rehenes.
La situación se volvió aún más desgarradora con informes de víctimas masacradas en sus propios hogares frente a sus familias y un trágico suceso en un festival de música al aire libre donde 260 personas fueron acribilladas. Estos eventos desencadenaron la respuesta de Israel, que lanzó una ofensiva aérea y terrestre con el objetivo declarado de eliminar a Hamás de la Franja de Gaza, bajo control del grupo terrorista desde 2007.
Israel ha sostenido que, a pesar de sus operaciones militares, está haciendo esfuerzos para evitar víctimas civiles, señalando que la infraestructura terrorista está integrada en lugares como hospitales, hogares, escuelas y mezquitas. No obstante, el Ministerio de Salud de Gaza, dirigido por Hamás, informa que al menos 11,320 personas han perdido la vida desde el inicio del conflicto, mayormente civiles. Estas cifras, sin embargo, no pueden ser verificadas de manera independiente y se cree que incluyen a miembros de Hamás, así como a civiles afectados por cohetes fallidos dentro de la Franja.
Reacciones Internacionales
La suspensión de relaciones por parte de Belice se suma a la creciente condena internacional sobre las acciones en Gaza. Mientras algunos países han optado por retirar embajadores como forma de protesta, otros han instado a un alto el fuego inmediato y negociaciones para poner fin al conflicto. La comunidad internacional observa con preocupación la escalada de violencia y espera una pronta solución que resguarde la seguridad y los derechos humanos de la población afectada.
Implicaciones Futuras
La decisión de Belice de suspender relaciones con Israel marca un hito en la postura latinoamericana frente al conflicto en Gaza. Se espera que esta acción genere debate y discusión en la región, mientras otros países evalúan sus propias posturas frente a la crisis. La diplomacia internacional sigue siendo un componente crucial para abordar estos desafíos, y el impacto de estas decisiones resonará en el escenario global en los próximos días.