Algunos tratamientos de peluquería para alisar el cabello pueden causar insuficiencia renal, según una investigación reciente de médicos de Jerusalén que ya ha llevado al Ministerio de Salud de Israel a prohibir una gran cantidad de productos.
Israel es el primer país en documentar numerosos casos y prohibir productos, según la profesora Linda Shavit del Centro Médico Shaare Zedek, quien dirigió la investigación.
El mes pasado, el Ministerio de Salud de Jerusalén prohibió todos los productos que contienen el ingrediente ofensivo, el ácido glioxílico, basándose en una vista previa de la investigación, que desde entonces se ha publicado en el American Journal of Kidney Diseases.
Shavit cree que la publicación de la investigación impulsará a los médicos de todo el mundo a comenzar a preguntar a los pacientes con insuficiencia renal, especialmente a las mujeres jóvenes, que constituyen la mayoría de la clientela de alisado del cabello, si se han sometido a tales tratamientos.
Se descubrirán muchos casos nuevos de enfermedades inducidas por el alisado del cabello, predijo.
“Documentamos 26 casos de lesión renal aguda en los últimos tres años, y desde que se realizó la investigación, el número de casos en Israel ha aumentado a 38 personas”, dijo a The Times of Israel el jueves. “Aunque sospechamos que esto es solo la punta del iceberg para Israel, y creemos que hay muchos casos en otros lugares”.
Los pacientes en el estudio experimentaron dolor abdominal, náuseas, vómitos y erupción en el cuero cabelludo después de usar los productos para alisar el cabello. La edad promedio fue de 28 años, la mayoría no tenía problemas médicos previos y una de las mujeres, todas pacientes, estaba embarazada.
“Ninguna de ellas murió y el daño fue reversible, pero tres mujeres jóvenes estuvieron en diálisis durante varias semanas, y algunas necesitaron biopsias de riñón que son invasivas. Algunos pasaron tiempo en cuidados intensivos, por lo que esto es grave”, dijo Shavit.
Los productos en cuestión contienen ácido glioxílico, un ingrediente común en las cremas para el llamado alisado permanente del cabello, que dura varios meses. Las cremas se aplican normalmente en los salones, pero ocasionalmente las usan las personas en el hogar.
“Lo que vimos es que el ácido glioxílico puede absorberse en la piel y, una vez en el torrente sanguíneo, puede metabolizarse en oxalato, luego ir a nuestros riñones y causar daño”, explicó Shavit, y agregó que esta conclusión se basa en una investigación detallada en múltiples pacientes, incluso a través de biopsias. El oxalato es una molécula de origen natural, que en cantidades excesivas puede causar insuficiencia renal.
Ella dijo que dado que docenas de pacientes que usaron los productos tuvieron que someterse a tratamiento médico en el hospital, es probable que los químicos ya hayan dañado los riñones de muchas otras personas que no lo saben. “Lo que documentamos puede ser solo algunos de los casos”, sugirió Shavit.
“Probablemente hubo muchos casos leves que no llegaron a un hospital. Puede haber muchas mujeres que son asintomáticas pero que tienen daño renal como resultado de estos productos”, dijo.
Shavit cree que la prohibición israelí de los tratamientos con ácido glioxílico salvará vidas, y espera que todos los salones lo observen y se abstengan de usar estos productos.
“Es importante concienciar a las mujeres, así como a los estilistas y peluqueros, para que utilicen solo los tratamientos permitidos y se adhieran a las instrucciones de los fabricantes”, afirmó.
“Me alegra que hayamos podido prevenir muchos más casos potencialmente mortales en mujeres que [buscaban] alisarse el cabello con materiales seguros”.