En el marco del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, el presidente de Israel, Isaac Herzog, expresó que en la actualidad ningún ciudadano israelí en su sano juicio está dispuesto a considerar un proceso de paz con los palestinos. Durante su intervención, Herzog destacó la preocupación predominante entre los israelíes respecto a su seguridad básica, especialmente después de la masacre perpetrada por terroristas de Hamas el 7 de octubre.
El mandatario israelí señaló que, tras el ataque sin precedentes en el sur de Israel, la prioridad de los ciudadanos es asegurarse de que no volverán a enfrentar amenazas similares desde el norte, sur o este. Herzog hizo hincapié en la pérdida de confianza a lo largo de los años debido a la glorificación del terrorismo por parte de los palestinos, lo que ha generado un clima de desconfianza en los procesos de paz.
La propuesta de Antony Blinken, Secretario de Estado de Estados Unidos, de normalizar las relaciones entre Arabia Saudita e Israel a cambio de un camino hacia la condición de Estado para los palestinos, fue supuestamente rechazada por el Primer Ministro Benjamín Netanyahu. Herzog subrayó que Israel ha perdido la confianza en los procesos de paz, no solo por la situación actual, sino también por la glorificación del terrorismo por parte de los vecinos palestinos.
En su discurso, Blinken insistió en que Israel no puede lograr una seguridad genuina sin un camino hacia un Estado palestino. Argumentó que esto podría contribuir a unificar el Medio Oriente y aislar a Irán, identificado por Herzog como un “imperio del mal” que socava los procesos de paz y la estabilidad mundial.
Herzog abordó la situación específica de Kfir Bibas, un rehén israelí de un año de edad, y su familia, secuestrados por Hamas en el kibutz Nir Oz el 7 de octubre. Enfatizó que la guerra no solo involucra a Israel y Hamas, sino que hay un imperativo de enfrentar las actividades provenientes de Irán que amenazan la paz y la estabilidad mundial.
El presidente de Israel llamó a la formación de una “coalición muy fuerte” para hacer frente a Irán y sus representantes. Imagina una coalición compuesta por fuerzas occidentales y regionales comprometidas con la reconstrucción de Gaza de manera que garantice la seguridad tanto para israelíes como para palestinos.
En cuanto al día después de la guerra, Herzog visualiza una coalición de naciones dispuestas a comprometerse con la reconstrucción de Gaza, dialogando con los habitantes de Gaza y la Autoridad Palestina. Sin embargo, las divergencias sobre quién debe controlar Gaza después del conflicto persisten, con Netanyahu abogando por una autoridad multinacional, mientras que algunos aliados árabes muestran reticencia.
Herzog también abordó la situación médica de los rehenes israelíes y destacó la importancia de la ayuda humanitaria. La entrada de medicamentos en Gaza, parte de un acuerdo negociado por Qatar y Francia, busca aliviar la situación crítica de los rehenes israelíes y proporcionar asistencia humanitaria a la población en general.
En resumen, la intervención de Herzog en Davos refleja los desafíos actuales y las perspectivas de Israel en el proceso de paz, destacando la necesidad de abordar no solo las cuestiones regionales inmediatas, sino también las implicaciones de actores externos, especialmente Irán, en la búsqueda de estabilidad en la región.