En un discurso en conmemoración del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmoud Abbas, expresó su firme rechazo al derecho de Israel a la autodefensa, denunciando lo que él llamó “agresión israelí” y solicitando un alto inmediato a estas acciones.
Abbas no solo se centró en condenar la presunta agresión israelí, sino que también instó a la comunidad internacional a tomar medidas urgentes para garantizar la entrega de ayuda humanitaria a Gaza. El líder palestino abogó por la prevención de la emigración forzada de árabes palestinos, la protección internacional al pueblo palestino, la búsqueda de justicia contra Israel, la oposición a la partición de Gaza y la reducción de su territorio, así como el rechazo de la presencia militar israelí.
En su discurso, Abbas destacó la necesidad de medidas estratégicas para hacer frente a las amenazas estratégicas contra la solución de dos Estados. Abogó por abordar la raíz del problema y la razón de la falta de seguridad en el Medio Oriente, señalando la importancia de poner fin a lo que llamó el régimen “colonial” israelí y la “ocupación” de la tierra de Palestina, incluida su capital, Jerusalén. Además, hizo hincapié en la importancia de ejercer los derechos de los palestinos, incluido el retorno de los refugiados palestinos a los hogares de los que fueron expulsados.
Uno de los puntos más controvertidos del discurso fue la afirmación de Abbas de que Israel no tiene derecho a alegar defensa propia. Según él, la operación militar israelí es un crimen, y la agresión y ocupación de tierras ajenas no pueden considerarse defensa propia.
Abbas concluyó su intervención llamando a la celebración de una conferencia de paz internacional. Argumentó que dicha conferencia sería crucial para forzar la voluntad internacional y oponerse a la insistencia israelí de no reconocer el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación. En sus palabras, es hora de que la comunidad internacional respalde la causa palestina y busque una solución pacífica y justa para el conflicto en la región.