Israel conmemora el “Día de Jerusalén” con una marcha multitudinaria para reivindicar la “unidad” de la ciudad como “capital indivisible y eterna”, en una jornada que abrirá las celebraciones de cara al 50 aniversario de la victoria en la Guerra de los Seis Días el año que viene.
El acto principal, conocido como “Baile de las Banderas”, tendrá lugar a las 16.00 horas, cuando jóvenes de los principales movimientos juveniles marchen entre el oeste y el este de la ciudad con banderas blanquiazules, hasta llegar al Muro Occidental (“Kotel Hamarabí”), conocido en el mundo gentil como Muro de los Lamentos.
Con ello buscan simbolizar la “unificación” física de la ciudad en 1967 y, legal, en 1981.
Israel reconquistó la parte oriental de Jerusalén, donde residen actualmente unos 300.000 palestinos, en el curso de la guerra de los Seis Días, y la anexionó años después en un proceso parlamentario no reconocido por la comunidad internacional.
Los palestinos reclaman Jerusalén oriental como capital de su futuro estado.
A diferencia de otros años, la Policía ha ordenado el adelanto de la marcha por la celebración del mes de Ramadán, y después de las 18.30 horas no permitirá la presencia de manifestantes israelíes en el barrio árabe de la ciudad vieja.
En años anteriores la marcha ha acabado convirtiéndose en una demostración de fervor nacionalista.
La ONG izquierdista Ir Amim ha presentó un recurso a la Corte Suprema, que será resuelta en las próximas horas, para exigir que no transcurra por zonas árabes, demanda que en años anteriores no ha prosperado.
Israel conmemora el “Día de Jerusalén” en coincidencia con el tercer día de la Guerra de los Seis Días, cuando las fuerzas de paracaidistas reconquistaron la parte oriental y llegaron hasta el Muro de los Lamentos, el lugar cercano al Monte del Templo que es el sitio más sagrado para el judaísmo, y que hasta entonces estaba bajo el control de Jordania, que la había ocupado en la guerra de 1948.
En homenaje a los soldados de esa batalla, líderes políticos y militares participarán por la tarde un acto oficial en la conocida como “Colina de la Munición” (Givat Hatajmoshet), en el norte de la ciudad y sobre la línea de armisticio fijada en Rodas en 1949, desde donde comenzó el asalto.
A lo largo de la jornada festiva hay convocados otros actos en centros educativos e instituciones públicas, que darán el disparo de salida a un año en el que Israel celebrará el “jubileo de la unificación”.