Los líderes israelíes lamentan la muerte de la Reina Isabel II: los lazos «florecieron» bajo su reinado

Herzog señala "el fin de una era" mientras el ayuntamiento de Tel Aviv se ilumina con la bandera del Reino Unido para conmemorar a la difunta monarca; el Congreso Judío Mundial saluda su "negativa a acobardarse ante el mal".

Los líderes israelíes lamentaron el jueves la muerte de la reina Isabel II de Gran Bretaña tras un reinado récord de 70 años.

Isabel subió al trono tras la muerte de su padre, el rey Jorge VI, en 1952, sólo cuatro años después de la fundación de un Israel entonces naciente.

«En nombre del Gobierno y del pueblo de Israel, envío mis condolencias a la Familia Real y al pueblo del Reino Unido por la muerte de Su Majestad la Reina Isabel II», dijo el Primer Ministro Yair Lapid. «Deja tras de sí un legado incomparable de liderazgo y servicio».

«Que su recuerdo sea para una bendición», añadió, utilizando una frase tradicional judía de conmemoración.

El presidente Isaac Herzog dijo que la muerte de la reina era «el fin de una era».

«La reina Isabel fue una figura histórica: vivió la historia, creó la historia y dejó tras de sí un legado magnífico e inspirador», dijo.

Herzog expresó sus condolencias al rey Carlos, el antiguo príncipe de Gales que se convirtió en monarca a la muerte de su madre, al resto de la familia real y al pueblo británico, al tiempo que elogió a Isabel como un «símbolo de liderazgo estable y responsable» en un mundo que cambió drásticamente durante su mandato.

«La Reina sirvió a la comunidad internacional durante 70 años, y bajo su reinado florecieron las relaciones entre el Reino Unido e Israel. Mis pensamientos están hoy con el Reino Unido», tuiteó el ministro de Defensa, Benny Gantz.

El líder de la oposición, Benjamín Netanyahu, aclamó a la difunta monarca como «un faro de integridad y una administradora de una segunda era isabelina que será recordada a lo largo de los siglos».

La embajadora de Israel en el Reino Unido, Tzipi Hotovely, dijo que la reina «era admirada en todo el mundo como una inspiradora y querida mujer de Estado».

«Israel se une a la familia real y al pueblo británico en el duelo por la pérdida de La Reina», escribió Hotovely en Twitter.

El Ayuntamiento de Tel Aviv iluminó el edificio del ayuntamiento con los colores de la bandera del Reino Unido para conmemorar a la reina.

Grupos judíos del Reino Unido y de otros países también lamentaron la muerte de la reina.

El Gran Rabino británico Ephraim Mirvis elogió a la reina como la encarnación de los «valores más nobles» de Gran Bretaña.

«Cada semana hemos rezado por su bienestar, su suerte y su sabiduría, y nunca nos ha defraudado», dijo, recordando «la cálida relación» que mantenía con los judíos británicos.

«Su afecto por el pueblo judío era profundo y su respeto por nuestros valores era palpable».

El grupo paraguas de la Junta de Diputados de los Judíos Británicos dijo que «no hay palabras que puedan describir plenamente el alcance de la pérdida de nuestra nación; la sabiduría, la benevolencia y la dedicación al deber de Su Majestad sirvieron de inspiración a generaciones. Que su memoria sea para bendición».

El Congreso Judío Mundial dijo que las comunidades judías del Reino Unido y la Commonwealth «han florecido y crecido en paz y seguridad» mientras Isabel fue monarca.

«Ella y su familia fueron símbolos queridos de la resistencia a la tiranía nazi», dijo el presidente del grupo, Ronald Lauder, en un comunicado. «La negativa de la reina Isabel a acobardarse ante el mal, sino a combatirlo con todas las formidables fibras de su carácter, será una inspiración para las generaciones venideras».

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