Rosh Hashaná es una de las festividades más importantes del judaísmo. Traducido literalmente como “Cabeza del Año”, marca el inicio de un nuevo ciclo en el calendario hebreo, y se convierte en un momento de reflexión, juicio y renovación espiritual.
Tabla de Contenido
¿Qué es Rosh Hashaná? Significado y nombres alternativos
Definición de Rosh Hashaná
Rosh Hashaná (en hebreo ראש השנה, Rosh HaShaná) significa literalmente “cabeza del año”. Es la celebración del Año Nuevo judío y se ubica en el primer día del mes de Tishrei, séptimo mes del calendario religioso judío. Marca no solo un cambio de año, sino un tiempo litúrgico y espiritual importante para la comunidad judía.
Nombres alternativos y sinónimos
Rosh Hashaná también se conoce como:
- Yom Teruá (“Día del toque del Shofar”) según la Torá.
- Yom Hazikarón (“Día del recuerdo”).
- Yom Hadín (“Día del juicio”), pues según la tradición se cree que durante esta festividad Dios juzga a cada persona y establece su destino para el año entrante.
- También forma parte de los Yamim Noraim o “Días Terribles / Días Temibles”, un período de estricto recogimiento espiritual que culmina con Yom Kipur (Día del Perdón).
Origen histórico y religioso de Rosh Hashaná
Origen bíblico
- En la Torá se menciona el “primer día del séptimo mes” como un día de reunión santa y de toque de trompeta (“teruá”) para el pueblo de Israel. Esa ordenanza se encuentra en Levítico 23:24.
- También se relaciona con la creación del hombre (Adán y Eva), de manera que Rosh Hashaná conmemora la creación humana o al menos su recuerdo en la tradición judía.
Evolución histórica
- Con el paso del tiempo, la festividad adoptó elementos rabínicos. La Mishná y el Talmud desarrollaron las leyes (halajot) sobre cómo y cuándo celebrarlo, incluyendo el uso del shofar, las oraciones especiales, la lectura de textos bíblicos y simbólicos, etc.
- La fijación de la fecha, la duración de dos días en la diáspora, las reglas sobre el calendario hebreo lunisolar, fueron refinadas por autoridades rabínicas.
Contexto religioso y teológico
- Rosh Hashaná representa un juicio divino: se considera que Dios “abre libros” donde quedan inscritos los actos de cada persona, su bien o su mal, y decreta su destino (vida, prosperidad, etc.).
- Está íntimamente conectado con el concepto de teshuvá (arrepentimiento) y con la idea de reconciliación —con Dios, con los demás, con uno mismo— como preparación para Yom Kipur.
Calendario, fechas y duración
¿Cuándo se celebra?
- Rosh Hashaná se celebra los dos primeros días del mes de Tishrei, que es el séptimo mes del calendario religioso judío.
- En 2025, por ejemplo, comienza al atardecer del 22 de septiembre y concluye en la noche del 24 de septiembre.
Duración y diferencias entre comunidades
- En la Diáspora (comunidades fuera de Israel), Rosh Hashaná dura dos días completos.
- En algunas comunidades, ciertos rituales varían ligeramente (horarios de oración, costumbres locales, alimentos simbólicos); sin embargo, la estructura general litúrgica es bastante similar.
Tradiciones, rituales y símbolos de Rosh Hashaná
El toque del Shofar: llamada al despertar espiritual
- El shofar es un cuerno de carnero o de otros animales permitidos, que se toca en la mañana durante los servicios religiosos, especialmente en la plegaria de Musaf.
- Hay distintos sonidos específicos: Tekiá (nota larga), Shevarim (tres gemidos/quebrados) y Teruá (serie de sonidos cortos), que combinados tienen significado simbólico, llamando al arrepentimiento y al despertar de la conciencia.
Oraciones especiales y sinagoga
- Se utilizan libros especiales de plegarias llamados majzor, que contienen todas las oraciones para los festivales altos, incluyendo Rosh Hashaná.
- En las plegarias se incluyen lecturas de la Torá como la historia de Abraham e Isaac, testimonios sobre el nacimiento, etc., dependiendo del día.
Comidas simbológicas
- Manzana con miel: se moja la manzana en miel para pedir un año dulce.
- Jalá redonda: pan festivo, algunas versiones lo hacen con pasas, simbolizando la continuidad, lo circular del año, etc.
- Cabeza de pescado o cabeza de carnero: para que uno “sea cabeza y no cola”.
- Granadas: se comen granadas porque sus semillas simbolizan abundancia de acciones buenas.
- Evitar lo amargo: se procura evitar alimentos muy agrios o picantes como símbolo de evitar un año amargo.
Costumbres adicionales
- Tashlij: ritual simbólico de arrojar los pecados al agua, realizado en la tarde del primer día de Rosh Hashaná (si no cae en Shabat).
- Encendido de velas: al inicio de la festividad, las mujeres y niñas encienden velas con bendiciones.
- Saludos rituales: expresiones como Leshaná tová tikatev vetijatem (“que seas inscrito y sellado para un buen año”).
Significado social y político
Comunidad y cohesión
- Rosh Hashaná reúne familias y comunidades. Es un momento en que se refuerzan los lazos familiares y comunitarios, con comidas comunes, visitas a sinagogas, ceremonias públicas del shofar en plazas para los que no pueden asistir a templos.
- Se promueve el perdón interpersonal, la reconciliación entre herman@s, amigos, vecinos. Esa dimensión social del arrepentimiento (teshuvá) es clave: no solo reconcilio con lo espiritual, sino con lo humano.
Política y libertad religiosa
- En algunos países, comunidades judías solicitan permisos especiales para celebrar públicamente, para congregarse, para que sus días festivos sean respetados laboralmente o que los servicios públicos se ajusten. En Panamá, por ejemplo, se otorgan días libres a quienes profesan la fe judía para celebrar Rosh Hashaná.
- También, en contextos de minorías, Rosh Hashaná es un momento de reafirmación cultural y de identidad frente a presiones de integración o secularización. Mantener las tradiciones de Rosh Hashaná (los alimentos simbólicos, el uso del shofar, las plegarias, el calendario hebreo) es parte de preservar la memoria histórica.
Contexto contemporáneo: cómo se vive Rosh Hashaná hoy
En Israel y en la Diáspora
- En Israel, la festividad puede verse con mayor visibilidad pública, con retransmisiones, actos nacionales, presencia de medios de comunicación, etc.
- En las comunidades de la diáspora, adaptaciones: medios de comunicación comunitaria, uso de traducciones, combinación de costumbres locales con las tradicionales, horarios de sinagoga ajustados a las leyes laborales de cada país.
Desafíos actuales
- Asimilación cultural: generación jóvenes que pueden sentirse menos conectadas con rituales antiguos, lo que exige esfuerzos de educación en las comunidades judías.
- Distancia geográfica: muchas comunidades están lejos unas de otras, lo que puede hacer difícil acceder a sinagogas o rabinos para ciertos rituales.
- Calendario moderno vs. gregoriano: las fechas varían cada año según el calendario hebreo, lo que provoca que Rosh Hashaná caiga en distintas fechas del septiembre/octubre gregoriano, lo que puede generar confusión en países no familiarizados con el calendario lunar-lunisolar.
Ejemplos recientes
- En 2025, se ha informado de celebraciones, decisiones sobre días libres y cierre parcial de comercios en Panamá con motivo de Rosh Hashaná.
- En Argentina, comunidades organizan actos del toque del shofar públicos y servicios comunitarios para asegurar que más personas puedan participar.
Impacto espiritual y cultural de Rosh Hashaná
Interioridad y transformación personal
Rosh Hashaná invita al creyente a la introspección: revisar sus acciones, buscar el arrepentimiento, pedir perdón y proyectar metas espirituales para el nuevo año. No es solo “celebrar” sino renovarse, asumir compromisos éticos y morales.
Renovación colectiva
Más allá de lo individual, tiene un efecto comunitario: refuerza la identidad judía, la memoria histórica, el sentido de pertenencia, la solidaridad. En tiempos de crisis, persecución o dispersión, festividades como Rosh Hashaná ayudan a mantener viva la cohesión y el legado.
Contribución cultural al mundo
Muchas costumbres de Rosh Hashaná (conceptos de año nuevo, juicio, reflexión, reconciliación, expiación) tienen correspondencias con festivales de otras religiones o con valores universales. Esto permite que personas ajenas al judaísmo comprendan y valoren su importancia desde un punto de vista intercultural y ecuménico.
Conclusión
Rosh Hashaná no es simplemente un calendario que marca un cambio de año; es una festividad cargada de significado religioso, simbólico y humano. Es el momento en que la comunidad judía —y cada individuo que participa— se detiene para evaluar el pasado, reconocer errores, buscar enmendarse, renovarse y proyectar un futuro mejor, tanto espiritual como moralmente. A través de tradiciones como el toque del shofar, las oraciones especiales, los alimentos simbólicos, la costumbre del tashlij y los saludos rituales, Rosh Hashaná transmite valores universales: arrepentimiento, reflexión, perdón, esperanza y renovación.
En un mundo de cambios acelerados, conflictos y desafíos globales, Rosh Hashaná ofrece un espacio de pausa, de memoria y de compromiso ético. Su impacto no solo se queda en la esfera religiosa, sino que se extiende socialmente: fortaleciendo identidades, promoviendo la solidaridad, y recordándonos la importancia de comenzar cada año nuevos proyectos con humildad y responsabilidad. En definitiva, Rosh Hashaná es una festividad que trasciende generaciones, territorios y tiempos —y cuyo mensaje, en su esencia, habla de renovación y de esperanza.