Gary Schiff es un consultor de recursos y guía con sede en Jerusalén que conecta Israel y Estados Unidos.
(JNS) Una vez más, vemos cómo Hezbolá nos amenaza, invade la zona desmilitarizada y nos desafía a tomar represalias. En el sur del Líbano, Hezbolá ha colocado miles de cohetes dirigidos contra Israel, violando directamente las estipulaciones del pacto que Israel acordó tras la Segunda Guerra del Líbano. Al final de las hostilidades, Israel estaba en posesión del sur del Líbano al sur del río Litani. Israel se retiró a su frontera anterior basándose en un acuerdo internacional, que Hezbolá violó inmediatamente.
Aviso a las Fuerzas de Defensa de Israel, si Dios no lo quiera, Israel se ve obligado a responder a otra ronda de agresión de Hezbolá, entiendan claramente que cuando se lucha en el sur del Líbano, se está luchando en el Israel bíblico, nuestra patria histórica, no diferente de Judea y Samaria.
En varios lugares de la Torá, Moisés mira hacia la tierra y anhela ver el Hermón y sus cataratas. Como señala el célebre profesor Dr. Yoel Elitzur en su texto clásico, “Lugares en la Parasha”, siempre que hay un artículo definitivo (la letra hey, que significa “el”) antes del nombre de un lugar en la Torá, significa que forma parte de la tierra de Israel prevista para el pueblo judío.
Más tarde, cuando Josué y el pueblo judío entraron en la tierra, todas las tribus se reunieron en Silo. A la tribu de Asher se le asignó el sur del Líbano, desde Sidón hasta el monte Líbano. Numerosas ruinas de los siglos en que la tribu de Aser habitó la zona se encuentran dispersas por todo el sur del Líbano.
Además, gracias a que los musulmanes conservaron los topónimos, conocemos el paradero aproximado de la presencia judía; es decir, las aldeas de los Asher.
Elitzur cuenta que, cuando era soldado en el sur del Líbano durante la Primera Guerra del Líbano, se quedaron sin comida. Afortunadamente, tropezaron con unos frutos secos, que consumieron rápidamente. Después, dijo que estaba contemplando qué decir para la bendición de la comida apropiada para dar gracias a Di-s. La bendición posterior es ligeramente diferente si la comida procede de la tierra bíblica de Israel, a diferencia de si se encuentra fuera de ella; dentro de la tierra bíblica de Israel, decimos gracias por “sus frutos”, es decir, los frutos de Israel. Basándose en su correcta comprensión de la geografía bíblica, dijo la bendición por “sus frutos”.
Volviendo a nuestra situación actual, según el INSS (Instituto de Estudios de Seguridad Nacional), el 12 de julio se cumplieron 17 años del estallido de la Segunda Guerra del Líbano; el 14 de agosto se cumplirá el aniversario de su final en virtud de la Resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU. La Resolución 1701 exigía un alto el fuego, la prevención de la reanudación de las hostilidades y el establecimiento de la zona al sur del río Litani como área libre de armas no gubernamentales. Como ahora sabemos, prácticamente nada de la Resolución 1701, de la que tan orgullosa estaba la entonces ministra Tzipi Livni, fue respetada por los libaneses, que han sido invadidos por la organización terrorista Hezbolá con el apoyo tácito de la UNFIL (Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano).
Hezbolá afirma ahora que Israel está ocupando de algún modo tierras a lo largo de su frontera septentrional que pertenecen legítimamente a Líbano. Lo cierto es exactamente lo contrario: Hezbolá está ocupando el Israel bíblico. (Hezbolá también planea la eliminación total de la presencia judía en cualquier porción de la tierra de Israel). Como antecedente, la actual frontera libanesa se basa simplemente en el Acuerdo Sykes-Pico entre los imperios británico y francés establecido durante la Primera Guerra Mundial.
Nadie aboga por que Israel reconquiste el sur del Líbano debido a su estatus bíblico. Sin embargo, las IDF harían bien en comprender la geografía bíblica para fortalecer su determinación.