La Fundación del Patrimonio de Israel (IHF, por sus siglas en inglés) ocupó los titulares el lunes cuando entregó al expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, un premio en reconocimiento a su papel fundamental en la intermediación de los históricos Acuerdos de Abraham en 2020. La ceremonia tuvo lugar en la finca Mar-a-Lago de Trump en Florida, donde el director ejecutivo de la IHF, el rabino David Katz, junto con otros miembros clave de la fundación, otorgaron el honor al expresidente.
El premio, con forma de menorá, lleva una conmovedora inscripción que dice: «Esta Menorá, que representa la luz eterna del mundo, se presenta al presidente Donald J. Trump en honor y celebración de hacer lo que ningún otro hombre ha hecho jamás: hacer la paz entre Israel, los Emiratos Árabes Unidos, Bahréin, Marruecos y Sudán en los extraordinarios Acuerdos de Abraham.»
El rabino David Katz, director ejecutivo de la IHF, compartió sus ideas sobre la reunión con Arutz Sheva-Israel National News. Expresó que Trump estaba genuinamente emocionado de recibir el premio y recordó su encuentro anterior en julio, cuando la fundación le había presentado la corona de Jerusalén por el importante acto de trasladar la embajada a la ciudad. Según el rabino Katz, Trump estaba de muy buen humor y dio una cálida bienvenida a todos.
Durante su conversación, el rabino Katz destacó las preocupaciones de Trump sobre la situación actual en Israel. El expresidente expresó un gran interés en el éxito de Israel al abordar los desafíos que enfrentaba y enfatizó la necesidad de abordar el conflicto de manera decisiva. El rabino Katz declaró: «El Presidente estaba muy preocupado por la situación en Israel. Él está muy a favor de que Israel tenga que ganar la guerra, destruir a Hamas. También hablamos un poco sobre antisemitismo.»
Los Acuerdos de Abraham, facilitados por la administración Trump, marcaron un hito histórico en el fomento de los lazos diplomáticos entre Israel y varias naciones árabes. El premio de la IHF sirve como un gesto simbólico, reconociendo la contribución de Trump para lograr la paz en la región. La menorá, con su representación atemporal de la luz, refleja la esperanza de un futuro más brillante y armonioso en el Medio Oriente.