Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han anunciado un importante avance en su ofensiva terrestre contra el grupo terrorista Hamás en la Franja de Gaza. Desde el inicio de la operación a finales de octubre, más de 800 túneles han sido descubiertos, de los cuales alrededor de 500 ya han sido destruidos o sellados. Estos túneles, según las FDI, conectan «activos estratégicos» de Hamás, revelando la complejidad y la extensión de la red subterránea utilizada por el grupo.
La destrucción de cientos de kilómetros de túneles, incluidos aquellos que pasan por áreas civiles como instituciones educativas, jardines de infancia y mezquitas, refuerza la afirmación de las FDI sobre el uso cínico de la población civil como escudo humano por parte de Hamás. Además, los hallazgos incluyen túneles que albergaban armamento utilizado por Hamás.
La estrategia de Hamás de utilizar túneles para llevar a cabo sus operaciones terroristas ha sido un desafío significativo para las FDI. Sin embargo, el ejército israelí ha respondido de manera contundente, empleando cargas explosivas y sellando estas rutas subterráneas para debilitar la infraestructura clave del grupo.
En paralelo a estos desarrollos, el portavoz en árabe de las FDI, el teniente coronel Avichay Adraee, emitió un aviso al batallón Shejaiya de Hamás. Instó a sus miembros a rendirse y deponer las armas, advirtiendo consecuencias similares a las sufridas por el comandante Wissam Farhat, quien murió en un ataque aéreo israelí.
La situación humanitaria en Gaza es descrita como «inimaginable» por residentes locales. La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA) informa al menos 160 muertes palestinas en dos incidentes, resaltando la crítica situación de la población civil atrapada en el conflicto. Las FDI, por su parte, argumentan que han emitido advertencias de evacuación antes de los bombardeos, buscando minimizar las bajas civiles.
En un esfuerzo por reducir las evacuaciones masivas, las FDI están utilizando un mapa de evacuación en línea para guiar a los palestinos en la Franja de Gaza, señalando áreas seguras y activas zonas de combate. Sin embargo, críticos argumentan que la falta de electricidad e Internet en algunas áreas limita la efectividad de esta medida.
A medida que la operación continúa, la comunidad internacional observa con preocupación la escalada del conflicto y la difícil situación humanitaria en la región. La OMS informa de condiciones «inimaginables» en los hospitales de Gaza, con una capacidad abrumada y pacientes recibiendo atención en el suelo.
La batalla contra los túneles de Hamás representa un capítulo crucial en el conflicto en curso. Con el desmantelamiento de esta infraestructura clave, Israel busca debilitar las capacidades operativas de Hamás y garantizar la seguridad de sus ciudadanos. Sin embargo, la complejidad de la situación subraya los desafíos tanto militares como humanitarios que enfrenta la región.