El presidente Isaac Herzog instó el lunes a los líderes judíos estadounidenses a respetar los resultados de las elecciones del día siguiente, aunque «pueden o no ser de su agrado”.
Los comentarios del presidente fueron vistos como una referencia implícita al potencial de un gobierno que incluya al partido Sionista Religioso de extrema derecha, una perspectiva que tiene a muchos grupos judíos estadounidenses preocupados.
«Queridos amigos, mañana los israelíes saldrán a votar. Sé que la frecuencia de las elecciones en Israel es algo desconcertante, y soy consciente de las preguntas planteadas en muchas comunidades judías de todo el mundo sobre el resultado de las elecciones», dijo Herzog, en un discurso en video ante la Asamblea General de las Federaciones Judías de América del Norte, celebrada esta semana en Chicago.
«Los resultados pueden ser de su agrado o no, pero el voto del pueblo israelí debe ser respetado. Más allá de esto, les digo a todos y cada uno de ustedes que la conexión firme y vital entre el Estado de Israel y los judíos de América del Norte no se verá comprometida, ni debe verse comprometida, sean cuales sean los resultados», dijo.
En las últimas semanas, grupos judíos estadounidenses han expresado su preocupación, incluso con funcionarios israelíes, sobre la esperada inclusión del sionismo religioso en cualquier coalición liderada por el Likud de Benjamin Netanyahu. A lo largo de los años, los dos principales líderes del partido, Bezalel Smotrich e Itamar Ben Gvir, han expresado repetidamente puntos de vista contra los árabes, los derechos LGBTQ y los judíos no ortodoxos que están profundamente en desacuerdo con las creencias de los judíos estadounidenses predominantemente liberales.
En su discurso ante los más de 1.200 participantes en la Asamblea General, que reunió a líderes judíos de todo Estados Unidos, Herzog destacó la contribución sin precedentes que los judíos estadounidenses han hecho al Estado de Israel a lo largo de los años.
«Durante más de un siglo, los judíos estadounidenses se han unido voluntariamente a los soldados sionistas, ya sea como activistas de la aliá o como soldados de las FDI, o defendiendo a Israel, siempre proporcionando fondos a las causas más importantes y nobles del Estado de Israel y las instituciones israelíes. Todo esto ha ayudado a convertir al Estado judío y democrático de Israel en el milagro moderno que todos podemos ver por nosotros mismos», dijo.
We were honored to welcome Israeli President Isaac Herzog at #GeneralAssembly22, who inspired us with his message. "The efforts of the Jewish Federations of North America at every level to assure an active, safe and flourishing Jewish home and future are vital to us all." pic.twitter.com/n2Q3zNGNK1
— The Jewish Federations of North America (@jfederations) October 31, 2022
Sin embargo, también reconoció que, en los últimos años, esos lazos se han tensado un poco.
«Nunca rehuyo el hecho de que hay brechas entre Israel y las comunidades judías en el extranjero, y hay un trabajo real por hacer», dijo Herzog. «Tengo plena confianza en los lazos que compartimos, que son más profundos que la política o las circunstancias cambiantes. Todos somos más grandes que esto”.
En su discurso, el presidente, que visitó Washington, DC la semana pasada, también señaló el «espantoso aumento del antisemitismo» en los Estados Unidos, pero dijo que el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, era «inflexible en combatir este odio violento, como un verdadero, verdadero amigo”.
Los israelíes acudirán a las urnas el martes por quinta vez en menos de cuatro años. Como fue el caso en cada una de las cuatro elecciones anteriores, la carrera es una división muerta entre una coalición de derecha y ultraortodoxa que apoya a Netanyahu y una amplia coalición de partidos de izquierda, centristas y conservadores que se oponen al regreso de Netanyahu al poder.