En un acontecimiento significativo, Israel ha enviado una delegación a Doha para participar en nuevas negociaciones de liberación de rehenes y alto el fuego tras una reciente propuesta de Hamás. Esta decisión se produce después de una conversación telefónica entre el primer ministro Benjamín Netanyahu y el presidente estadounidense Joe Biden, en la que Biden expresó su apoyo a los esfuerzos para finalizar el acuerdo. Según se informa, el jefe del Mossad, David Barnea, encabeza la delegación israelí.
El gabinete de seguridad se reunió el jueves por la noche para discutir la postura de Israel en las negociaciones indirectas, que se han mostrado prometedoras tras las enmiendas al acuerdo propuesto presentado por Hamás. A pesar de la guerra en curso, Netanyahu ha reafirmado el compromiso de Israel de lograr sus objetivos bélicos, enfatizando que el conflicto continuará hasta que se cumplan todos los objetivos.
Desarrollos y declaraciones clave
- A NOSOTROS. Apoyo: El presidente Biden acogió con satisfacción la decisión de Netanyahu de autorizar negociaciones en las que participen mediadores estadounidenses, qataríes y egipcios. La aprobación de Biden indica un fuerte respaldo de Estados Unidos a los esfuerzos en curso para resolver el conflicto y asegurar una tregua.
- El compromiso de Netanyahu: En sus conversaciones tanto con sus negociadores como con el presidente Biden, Netanyahu reiteró la determinación de Israel de poner fin a la guerra sólo si se cumplen sus objetivos.
- Papel del jefe del Mossad: Se espera que David Barnea, el jefe del Mossad, encabece la delegación que se dirige a Doha, lo que indica lo mucho que está en juego y la seriedad de estas conversaciones.
Optimismo entre los funcionarios
Altos funcionarios israelíes, incluido el ministro de Defensa, Yoav Gallant, han expresado un optimismo cauteloso respecto de las posibilidades de llegar a un acuerdo. Gallant, que ha participado activamente en conversaciones con funcionarios estadounidenses, señaló que Israel está “más cerca que nunca” de finalizar un acuerdo. Un negociador israelí ha descrito la última propuesta de Hamas como un “avance muy significativo”, que aumenta la posibilidad de negociaciones exitosas.
Posición y declaraciones de Hamás
Hamás ha mostrado voluntad de llegar a un acuerdo, y su última propuesta indica un cambio notable. Un alto funcionario estadounidense anónimo destacó que los ajustes de Hamás en su posición han creado una “apertura bastante significativa” para un posible acuerdo. Sin embargo, el portavoz de Hamás en el Líbano, Ahmed Abdel Hadi, sigue siendo escéptico sobre las intenciones de Netanyahu y expresa desconfianza tanto en el primer ministro israelí como en la administración estadounidense.
El acuerdo en progreso
El acuerdo actual que se está discutiendo se basa en un esquema israelí a largo plazo de tres etapas, cuyo objetivo es poner fin a la guerra y asegurar la liberación de todos los rehenes. Más de seis meses de esfuerzos de mediación por parte de Estados Unidos, Qatar y Egipto han luchado por lograr avances sustanciales. Sin embargo, las recientes enmiendas de Hamás han inyectado nuevas esperanzas en las negociaciones.
Desafíos e incertidumbres
A pesar de los avances, persisten desafíos importantes. Israel pretende mantener ciertas cláusulas vagas para conservar la opción de reanudar las acciones militares si es necesario, mientras Hamás busca garantías contra tales acciones. Ambas partes deben cerrar estas brechas antes de llegar a un acuerdo final.
Presión interna y protestas
En Israel, se ha intensificado el debate interno sobre priorizar el regreso de los rehenes frente a continuar la lucha contra Hamás. Han estallado protestas masivas en todo el país, y miles de personas exigen que Netanyahu dé prioridad a un acuerdo para la liberación de los rehenes. La presión sobre el gobierno israelí está aumentando y los manifestantes acusan a Netanyahu de poner en peligro la seguridad nacional y piden nuevas elecciones.
Conclusión
Las renovadas conversaciones en Doha marcan un momento crítico en el conflicto entre Israel y Hamas. Con la participación de alto nivel de los mediadores internacionales y el optimismo cauteloso de los altos funcionarios, existe una posibilidad tangible de lograr un gran avance. Sin embargo, persisten importantes desafíos e incertidumbres, y el resultado de estas negociaciones tendrá profundas implicaciones para el futuro de la región.