El Monte del Templo en Jerusalén, considerado el lugar más sagrado para el judaísmo y el tercero más sagrado para el islam, ha sido un foco recurrente de tensiones entre Israel y los palestinos. En septiembre de 2023, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, advirtió a los ministros que cualquier visita al Monte del Templo debía ser coordinada con él. Esto siguió a una visita de un legislador de extrema derecha que había entrado en el sitio sagrado, lo que generó preocupaciones de una posible escalada de violencia. Esta advertencia surge en un contexto en el que se han producido cambios no oficiales en la política que rige las oraciones judías en el lugar.
El Monte del Templo y su Significado Religioso
El Monte del Templo, conocido en árabe como Haram al-Sharif, alberga la mezquita de Al-Aqsa y la Cúpula de la Roca, lugares venerados por los musulmanes. Para los judíos, es el sitio donde se cree que se ubicaba el antiguo Templo de Jerusalén, el cual fue destruido hace siglos. Dada su importancia religiosa para ambas comunidades, cualquier cambio en el manejo de este lugar ha desatado protestas, disturbios e incluso violencia a lo largo de los años.
Tradicionalmente, los judíos tienen acceso limitado al Monte del Templo y no se les permite rezar en el sitio bajo un acuerdo no escrito conocido como el «status quo». Esta política, vigente desde hace décadas, fue diseñada para mantener la estabilidad y evitar tensiones entre las comunidades religiosas.
La Advertencia de Netanyahu a los Ministros
En septiembre de 2023, Netanyahu reiteró que cualquier visita de un ministro israelí al Monte del Templo debía recibir su aprobación previa. Esta decisión vino después de que Yitzhak Kroizer, un miembro del partido de extrema derecha Otzma Yehudit, visitara el lugar sin autorización. Kroizer forma parte de un grupo de legisladores que han abogado por mayor flexibilidad en las restricciones a las oraciones judías en el Monte del Templo.
La oficina del primer ministro emitió un comunicado en el que Netanyahu reiteraba que los ministros no podían subir al Monte sin su permiso. La medida refleja las preocupaciones del gobierno sobre las implicaciones que estas visitas podrían tener en la estabilidad regional.
Cambios en el «Status Quo» y Tensión Política
A pesar de las declaraciones de Netanyahu de que no hay cambios en el «status quo», algunos observadores señalan que ha habido modificaciones evidentes. En particular, en las últimas semanas, la policía israelí ha permitido que los judíos recen abiertamente en el sitio, lo que antes no estaba permitido. Esto ha desatado críticas tanto dentro de Israel como en el extranjero.
El número de visitantes judíos al Monte del Templo ha aumentado significativamente en los últimos años, y las oraciones judías, que antes se realizaban discretamente, ahora se llevan a cabo de manera más abierta. Activistas judíos por los derechos de oración han indicado que esta práctica es ahora parte de la rutina diaria y que la policía lo permite sin interferencias.
El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, líder del partido Otzma Yehudit, ha realizado múltiples visitas al Monte del Templo desde que asumió el cargo en diciembre de 2022. Ben Gvir ha defendido el derecho de los judíos a orar en el sitio, lo que contrasta con las afirmaciones de Netanyahu de que el «status quo» no ha cambiado.
Advertencias de las Autoridades de Seguridad
En medio de este panorama, las autoridades de seguridad israelíes han advertido sobre un posible aumento de la violencia debido a la controversia en el Monte del Templo. Según un informe de Channel 12, los jefes de seguridad advirtieron a los líderes políticos que la creciente ira palestina por el tema podría desencadenar una escalada significativa de violencia en Cisjordania y Jerusalén.
Estas preocupaciones son especialmente graves durante el periodo previo a las fiestas judías, cuando muchos judíos visitan el Monte del Templo. Se ha advertido que tanto Irán como sus aliados están intentando fomentar el conflicto en Cisjordania a través de financiamiento y armamento, lo que aumenta el riesgo de una escalada violenta.
El líder de la oposición israelí, Yair Lapid, criticó al gobierno, señalando que ignorar las advertencias de seguridad sería una irresponsabilidad. Lapid hizo un llamado a prepararse adecuadamente para las festividades de Tishrei y a gestionar la situación con prudencia.
Implicaciones para la Seguridad Nacional
La situación en el Monte del Templo tiene importantes repercusiones para la seguridad de Israel en múltiples frentes. El ejército israelí ya ha asignado importantes recursos a Cisjordania, pero la posibilidad de una mayor escalada podría obligar a destinar aún más efectivos a esa zona. Esto podría tener consecuencias perjudiciales para otros frentes, como el conflicto en Gaza o la disuasión contra Irán en el norte.
El presidente israelí, Isaac Herzog, también intervino en la cuestión. En una reunión con el embajador estadounidense Jack Lew, Herzog reafirmó el compromiso inquebrantable de Israel de mantener el «status quo» en el Monte del Templo. Además, mencionó que tanto los acuerdos políticos establecidos desde 1967 como las decisiones de importantes rabinos respaldan este enfoque.
Consecuencias Políticas y Religiosas
Algunos líderes religiosos ortodoxos han prohibido durante mucho tiempo las visitas judías al Monte del Templo debido a preocupaciones sobre la pureza ritual. Esta prohibición coincide con el «status quo» existente, que restringe las actividades judías en el lugar sagrado. Sin embargo, las comunidades ultraortodoxas continúan manteniendo esta prohibición y sus rabinos más destacados han denunciado el aumento de las visitas y las oraciones abiertas en el sitio.
El aumento de las visitas judías y la permisividad en torno a las oraciones en el Monte del Templo no solo ha generado tensiones políticas y de seguridad, sino también divisiones dentro de la comunidad judía. Mientras algunos ven estas visitas como un derecho religioso, otros consideran que podrían poner en peligro la frágil paz en Jerusalén y los territorios palestinos.
Conclusión
El Monte del Templo sigue siendo un símbolo de la compleja relación entre israelíes y palestinos, así como entre las diversas facciones dentro de Israel. Las decisiones sobre el acceso y las actividades permitidas en este lugar sagrado tienen el potencial de desatar violencia y afectar las dinámicas de seguridad en la región. A medida que se acercan las festividades judías, las advertencias de las autoridades de seguridad israelíes subrayan la necesidad de manejar la situación con extrema cautela para evitar una escalada de violencia que podría tener repercusiones tanto dentro como fuera de Israel.
La visita debe de estar permitida solo para judíos o quienes deseen que judío ore sobre el monte del templo por lo menos una vez «Yom Kippur», o caso vamos a espera que Dios mismo abra la Puerta Dorada, pues si así es la cosa hasta con el Arca de la Alianza y la Menorá en manos, también la puerta habrá de ser abierta, y el Tempo reconstruido para que se tengan que cumplir los 613 mandamientos.
Si Dios lo permite pronto será un hecho, en esta misma vida. Padre sea removido el lamento, para que tu pueblo deje de llorar, entréganos los utensilios Sagrados y Originales, para que a causa de ellos caigan los enemigos de tu pueblo en su propia tierra y sobre la tierra al igual que lo hiciste en Babilonia. Para que no se tenga que utilizar los utensilios reconstruidos salvo que usted ni no entregue los orinales. Amén, Amén.
A causa de la usencia de Rey y Sumo Sacerdote sea tu bendición sobre su primer ministro, para que tenga existo en sus campañas para asegurar la paz, también bendice a al segundo general que protege y cuida de Ucrania. Amén.