En una operación conjunta, soldados de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) llevaron a cabo la captura de la base de entrenamiento ‘Falestin’ utilizada por el grupo terrorista Hamás en el norte de la Franja de Gaza. La operación, liderada por la 14ª Brigada de Reserva en colaboración con el Cuerpo de Ingeniería Blindada y de Combate, fue desencadenada tras el descubrimiento de actividades terroristas en la supuesta instalación de entrenamiento.
La base, que aparentaba ser un centro de entrenamiento inofensivo, servía como punto de preparación para ataques contra civiles israelíes y las propias fuerzas armadas israelíes. La ofensiva incluyó ataques aéreos y de artillería para asegurar el puesto avanzado y poner fin a las amenazas que emanaban de la misma.
Durante la incursión, los soldados de las FDI desenterraron una red de túneles terroristas, así como explosivos y minas destinadas a dañar a los efectivos militares israelíes. La existencia de esta infraestructura subterránea subraya la complejidad y peligrosidad de la base de entrenamiento de Hamás.
La operación resultó en la eliminación de decenas de terroristas, junto con la destrucción de múltiples puestos de lanzamiento de morteros, antitanques, puestos de observación y otras infraestructuras estratégicas utilizadas por el grupo extremista. Este golpe significativo ha debilitado significativamente la capacidad operativa de Hamás en la región.
En un comunicado, las FDI destacaron la necesidad de la operación, indicando que la base en Falestin estaba siendo utilizada para planificar ataques indiscriminados contra civiles y soldados israelíes. El éxito de la misión demuestra el compromiso de Israel en la lucha contra el terrorismo, buscando asegurar la paz y la seguridad para sus ciudadanos.
Sin embargo, la operación no se limitó a la base de entrenamiento. Las FDI también llevaron a cabo una acción específica en el Hospital Shifa, basándose en inteligencia que señalaba el uso indebido de las instalaciones médicas por parte de Hamás. La declaración oficial afirmó que la operación tenía como objetivo derrotar a Hamás y rescatar a rehenes, subrayando que Israel está en guerra con la organización terrorista, no con la población civil en Gaza.
Esta acción se produce después de que el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, confirmara que Estados Unidos posee inteligencia independiente que sugiere la utilización del Hospital Shifa por parte de Hamás y la Yihad Islámica para llevar a cabo operaciones militares, incluyendo el almacenamiento de armas.
La operación en el hospital ha suscitado controversia, ya que algunos argumentan que la presencia militar en instalaciones médicas puede poner en riesgo la vida de civiles inocentes. Sin embargo, las FDI reiteran su compromiso de dirigir acciones precisas y selectivas para combatir a grupos terroristas, subrayando la distinción entre sus objetivos y la población civil.
En medio de este desarrollo, Israel continúa enfocándose en la seguridad y en la protección de sus ciudadanos, destacando la importancia de desmantelar las infraestructuras terroristas que representan una amenaza constante en la región. La comunidad internacional observa de cerca estos eventos, atentos a las implicaciones y consecuencias de las acciones emprendidas por las Fuerzas de Defensa de Israel en su lucha contra el terrorismo en Gaza.