Rishon Lezion, adyacente a Tel Aviv, ofrece la mejor calidad de vida de todas las ciudades israelíes, según una encuesta realizada por la Oficina Central de Estadística (CBS).
El estudio utilizó 86 indicadores para evaluar desde las perspectivas de empleo y los resultados de los estudios secundarios, pasando por la vivienda y el acceso a parques, hasta los conocimientos de Internet y los sentimientos de satisfacción y soledad, en 16 ciudades de más de 100.000 habitantes cada una.
Los datos se recopilaron hasta 2021, y Rishon Lezion superó la media nacional en 35 medidas. La ciudad -situada en el área metropolitana de Tel Aviv y fundada por inmigrantes rusos en 1882- encabezó la clasificación en cuanto a satisfacción con el hogar y la vivienda en general, y también obtuvo las puntuaciones más altas en cuanto a oportunidades de ascenso en el trabajo, aprecio de los familiares y porcentaje de usuarios de Internet. La ciudad también obtuvo la puntuación más baja en cuanto a sentimientos de depresión y aislamiento.
Otras ciudades que obtuvieron puntuaciones especialmente altas en toda la gama de medidas de calidad de vida fueron Petah Tikva, a la cabeza en limpieza de zonas residenciales; Netanya, por el bajo coste de los servicios de vivienda; y Ashkelon, segunda en satisfacción general con la vida.
Los habitantes de Rehovot son los más propensos a estar satisfechos con sus ingresos y a confiar en el sistema sanitario, mientras que Ramat Gan tiene la tasa de desempleo de larga duración más baja, la mayor confianza en el sistema jurídico y el mayor uso de los servicios gubernamentales en línea. Kfar Saba tiene la renta media más alta y el porcentaje más bajo de hogares que pagan más del 30% de su salario mensual neto por la vivienda.
Tel Aviv-Jaffa ocupa un lugar destacado en cuanto a medidas relacionadas con el empleo. Pero la mayor área metropolitana de Israel quedó peor situada en las medidas relacionadas con la vivienda. La ciudad tiene hoy el precio medio de apartamento más alto del país, algo menos de 3 millones de NIS (880.00 $), y en 2021, cuando se recopilaron los datos, fue nombrada la ciudad más cara del mundo.
Haifa se situó en el centro del grupo de ciudades, mientras que la calidad de vida más baja según la cesta de medidas evaluadas se encontró (en orden descendente) en Bnei Brak, Beersheba, Ashdod, Holon, Jerusalén y Bat Yam. La calificación global de Jerusalén se vio rebajada por su tasa de empleo y el porcentaje de adolescentes que terminan el bachillerato.